Principios del siglo XIX. Las mujeres ocupan las portadas de los periódicos de la época y las firman. Son las 'dibujantas', como las llaman en la exposición del Museo ABC. Fueron artistas pioneras en el mundo de la ilustración.
"Son mujeres con una extraordinaria personalidad y una extraordinaria fuerza. Se nos ha preguntado más de una vez: ¿Se nota que es ilustración de mujeres? Y decimos que 'no', que lo que se nota es que es ilustración de calidad. No hay una ilustración de mujeres", afirma Josefina Alix, comisaria de la exposición 'Dibujantas'.
No fue fácil, cuentan, estampar su nombre en las portadas de revistas como 'ABC' o 'Blanco y Negro'. Marta González, comisaria de la exposición explica que "las mujeres ilustraban generalmente las secciones de los periódicos que eran de decoración, interiorismo, labores o moda".
Pero los aires de cambio de los años 20 y 30 les ayudaron a deshacerse del apellido "mujer de" y firmar con nombre propio. Después llegó la guerra, el blanco y negro y, de nuevo, el anonimato y el silencio.
"La sociedad que quedó después de la Guerra Civil fue una sociedad de tinieblas y oscura en la que la mujer tenía que ser esposa, madre y entonces muchas de ellas desaparecieron completamente", indica Josefina Alix.
Durante la dictadura, resistieron algunas ilustradoras como Coti o Xelia. Realismo, art déco, cubismo... los estilos evolucionaron con las tendencias que llegaron desde Hollywood y su ambiente cosmopolita, años en los que creció el número de autoras.
Todas y cada una de estas mujeres, desde los óleos de Madame Gironella a las técnicas de ordenador que utilizan hoy en día la nueva generación de ilustradoras, son artistas pioneras que han ilustrado páginas y portadas de la prensa española.
'Estarán' en el IFEMA hasta el 12 de enero
Los superhéroes y las superheroínas de Marvel cumplen 85 años: salvando el mundo desde los tiempos del fascismo
Marvel ha traspasado las páginas de los cómics. Y no solo por haber llegado al cine con algunos de los taquillazos más importantes de la historia, sino porque se han convertido incluso en modelos de conducta.