Negros nubarrones se cernían sobre el proyecto de Luis Enrique al frente de la Selección española tras la derrota frente a Ucrania (1-0) y el 'pinchazo' contra Suiza (1-1). Sin embargo, en el partido en el que 'La Roja' se jugaba a vida o muerte su presencia en la 'Final Four' de la Nations League, el elenco del técnico asturiano se reivindicó ante Alemania. Casi nada.
Ganar o ganar. Era lo único que le valía a España para acceder por primera vez en su historia a la ronda final de la novedosa competición, y así lo hizo. Y de qué manera. Un 'set' en blanco le endosó la Selección a la 'Mannschaft' para alejar los fantasmas que acechaban el proyecto de Luis Enrique.
Ferran Torres (tres), Morata, Rodri y Oyarzabal fueron los autores de los seis tantos españoles, pero de La Cartuja salieron reforzados especialmente tres hombres.
Luis Enrique
"Yo decía que era optimista, que mi equipo me ponía y que no era una pose". Estas fueron las palabras del exentrenador del Barcelona al término del encuentro. Tras volver al cargo después de un receso por motivos familiares, el proyecto de Luis Enrique comenzó a entrar en terreno de jaque al encadenar diversos tropiezos.
Sin embargo, en Sevilla se vio lo que el pide el técnico a su equipo: intensidad en la presión en campo rival, transiciones rápidas, profundidad de los laterales y llegada de segunda línea de los centrocampistas. Tras el 6-0 a los teutones, la España de Luis Enrique mira con otros ojos a la Eurocopa.
Unai Simón
Por la derecha y sin intermitente. Así ha pasado el guardameta del Athletic Club de Bilbao a De Gea y Kepa en la 'pole position' de la portería española. El flojo nivel de Arrizabalaga en el Chelsea, que ha conllevado el fichaje de Mendy y su paso al banquillo, unido a diversos errores del portero del Manchester United, han hecho que Unai se postule como titular de la Selección a estas alturas de temporada.
Ante Alemania, al igual que en sus últimos encuentros, el joven guardameta vasco no ha cometido ningún error y ha mostrado mucha seguridad bajo palos. Ahí hay portero.
Rodri Hernández
De vivir en una residencia de estudiantes en Castellón para poder entrenar con el Villarreal a comandar el centro del campo del Manchester City y del combinado nacional. Así ha sido el cambio de Rodri Hernández en apenas dos años.
Al igual que Guardiola tras su única temporada (pero qué campaña) en el Atlético de Madrid, Luis Enrique vio en el pivote 'cityzen' el sustituto ideal de Sergio Busquets en la sala de máquinas de 'La Roja'.
Con temple, elegancia, acierto y decisión, Rodri fue el faro de la Selección en la capital andaluza, rompiendo las líneas alemanas con sus pases filtrados, y apoyando a Pau Torres y Enric García en tareas defensivas. Si continúa a este nivel, Busquets lo tendrá muy difícil para ser titular en la Eurocopa.
Koke
Fue el motor de España ante Alemania. De la escuela de Simeone, Koke Resurrección no dejó de correr en todo el partido frente a los teutones. Un auténtico 'box to box' que fue de área a área , creando superioridad numérica en distintas zonas del campo.
Al igual que en el Atleti, sus botas ya son dueñas del balón parado del cuadro de Luis Enrique. De ellas nació el primer gol del partido, obra de Morata.
Ferran Torres
25 millones y una minucia en concepto de variables. Si dicen (con razón) que el Manchester City no escatima a la hora de pagar por futbolistas, con Ferran Torres hicieron un negocio que ya está provocando más de un dolor de cabeza en la zona noble de Mestalla.
En apenas dos meses, Ferran ha evolucionado a un extremo completo de antaño, de esos que juegan por la misma banda de su pierna buena. Ha ganado en forma física, sentido del juego y definición, y así lo demostró frente a la 'férrea' Alemania.
Y es que entrecomillo porque Ferran entró como cuchillo en mantequilla por la zaga de la 'Mannschaft', anotando tres goles (que pudieron ser cuatro o cinco), dando un despliegue de velocidad y esfuerzo, y confirmando el enorme (y nuevo) error que cometió Meriton, empresa propietaria del Valencia CF, al dejar ir al canterano por tan ínfima cantidad.
Frente a él estaba Sané, futbolista que dejó su sitio para que el valenciano aterrizase en el Etihad, y que quedó eclipsado por el buen hacer de su sustituto. Muchos imaginaron a Guardiola en su casa de Mánchester acariciando un gato frente a la chimenea mientras veía el partido. Y, la verdad, de enhorabuena debía estar.
