El Real Madrid dejó escapar la ventaja que le daba en Balaídos un doblete del galés Gareth Bale y acabó cediendo un empate ante el Celta de Vigo (2-2), con claros síntomas de desmotivación en una Liga en la que se queda a 16 puntos del líder, el Barcelona.
La mala línea del Real Madrid en LaLiga se extendió en Vigo en un mal partido, con juego a arreones que le dio la remontada por momentos con un doblete de Bale en tres minutos que daban la vuelta al tanto inicial de Daniel Wass.
En la segunda parte el Celta aprovechó la falta de control del equipo de Zinedine Zidane y acabó empatando con un testarazo de Maxi Gómez a ocho minutos del final después de que Keylor Navas salvase un penalti chutado por Iago Aspas.