El Real Madrid ha demostrado su gran fortaleza en el Metropolitano. Los blancos, que suman seis victorias en seis partidos de LaLiga, se impusieron con claridad en el derbi ante el Atlético en un encuentro en el que casi no sufrieron y en el que ha vuelto a destacar un jugador: Fede Valverde.
Ya nadie discute que el uruguayo tiene que jugar sí o sí. Y tampoco se discute que, por fin, ha encontrado su lugar en el campo. Ha encontrado su sitio. Han podido, él y el cuerpo técnico de turno, aprovechar las virtudes de un potentísimo futbolista que abarca todo el campo.
Que juega bien en defensa. En mediocampo. En ataque... Que todo lo que hace, lo hace a la perfección. Que llega, y que marca. Porque ante el Atleti, arrancando desde la derecha, volvió a mojar. Y sigue demostrando que de 'pajarito' nada. Que ahora, tal y como está, debería ser Fede 'el Halcón' Valverde.
Valverde, el jugador total
Cuando tocaba defender, que el Real Madrid lo hizo y mucho, y muy bien, prácticamente formaba de carrilero junto a Carvajal para fijar su mirada en Carraco. Y para atacar, junto a Vinicius y a Rodrygo.
Así, llegando, anotó un gol que noqueó a los de Simeone. Jugada de Vinicius por la zurda, dejando atrás a todos. Su disparo, a la madera... pero sí, ahí estaba Valverde. El uruguayo, listo, aprovechó el rechazo estando donde debía estar para poner el 0-2.
Antes, gol de Rodrygo, elegido MVP del derbi. Fue así con razón, porque el brasileño se inventó un tremendo golazo gracias en gran parte a un pase excelso de Tchouameni. Felipe se lo comió, y él embocó a las mallas un remate que no supo y que no pudo detener Oblak. Ahí también participó Valverde con una arrancada potentísima.
El Atleti cayó con ese 0-2. Aunque debían ir a más en el segundo acto, les costó 30 minutos engancharse. Fue posiblemente cuando menos se esperaba el tanto rojiblanco y de una forma rarísima. Mario Hermoso anotó con el hombro después de que Militao le quitase el balón de las manos a Courtois en un saque de esquina.
Lo que Hermoso te da...
No hubo nada más, porque al defensa le expulsaron por doble amarilla. La segunda, en una acción cuanto menos cuestionable por unos mutuos empujones con Ceballos en la típica jugada a balón parado. La primera, por ir a por Carvajal. Esta detuvo el ritmo y el apretón del Atleti.
El derbi se queda en manos del Real Madrid. De un Real Madrid que suma cada partido jugado por victoria y que deja al Atlético a ocho puntos en tan solo seis encuentros de LaLiga disputados.