Hubo quien no pudo viajar a Wembley para ver la final. Hubo quien sí. Hubo muchos que tuvieron suerte y pudieron sentir en vivo y en directo la alegría de ver al Real Madrid ganar una Champions League. Ganar la Decimoquinta. Imponerse en el mítico feudo de Londres al Borussia Dortmund por 0-2.

Así estaban en su regreso a casa. En su vuelta a la capital de España. En el aterrizaje en el aeropuerto de Barajas. Tanto los que vivían su primera vez como los que llevan unas cuantas. Todos, con una sonrisa. Todos, con la felicidad y la alegría de saber que han vivido, como dijo un aficionado, "una experiencia única en la vida".

Era su primera final... pero hay quien lleva nueve: "No le fallo a Florentino. Le dije que si yo no voy el Real Madrid no gana".

Porque desde 1998 ganan toda final de Champions que juegan... y ya piensan en la Decimosexta: "A todo lo que nos echen lo vamos a barrer".

Ahora, toca descansar más bien poco porque el Real Madrid tiene todavía que celebrar junto con su afición la recién conquistada Champions con una rúa que terminará con fiestón en el Bernabéu.