Gareth Bale quiere ser hostelero. El galés, que afronta sus últimos meses en el Real Madrid, busca abrir un bar ambientado en el golf, una de sus grandes pasiones, pero podría tener un problema con el que a saber si había contado cuando pensó en dicho proyecto: los vecinos.
Bale, internacional por Gales, quiere abrir su bar en el puerto de Bristol. Sin embargo, y como afirma la 'BBC', los vecinos de la zona no tienen ganas de que allí haya un local nocturno.
No es ni por Bale ni por el golf, sino porque el local cerraría a las 00:30 de domingo a miércoles y a la 01:30 de jueves a sábado.
David Mair, presidente de la asociación de arrendatarios de la zona que cuenta con 104 apartamentos, ya fue la voz cantante en otra protesta por un local de características similares.
El bar finalmente abrió, pero tuvo que cambiar sus horarios nocturnos por las protestas de los vecinos.
Mientras, el Ayuntamiento de Bristol ya ha aceptado la queja de los vecinos, y habrá una audiencia para ver qué se hace.
La zona ya cuenta con locales de ocio nocturno, pero están lejos de la zona de residencias. Sin embargo, con el tiempo estos sitios se han 'expandido' llegando a áreas muy cercanas a las viviendas.
Bale sabe que por allí hay gente. Que la zona es popular y muy transitada y que además cuenta con varios campos de minigolf en la zona.