Nuevo partido áspero del Real Madrid, de muchas ocasiones, poca concreción, menos fluidez en el centro del campo, pero con el Mbappé del París Saint-Germain.
Un doblete del francés da la victoria al cuadro de Carlo Ancelotti ante un Betis que no perdía en el Bernabéu desde 2016... y con razón.
Los de Manuel Pellegrini saltaron con una idea clara al terreno de juego: aguantar, cerrar líneas, robar y salir rápido rumbo a la portería de Courtois.
Con el taque de gasolina verdiblanco al máximo, los hispalenses se fueron al descanso con empate a cero en el luminoso y con el 'runrún' acrecentándose en el Bernabéu. El Madrid atacaba, percutía, pero no definía.
Ya en el segundo acto, la polémica se apoderó de los primeros minutos después de que Alberola Rojas no señalase penalti después de una mano clara de Diego Llorente y una interpretable zancadilla de Sabaly a Ceballos pocos minutos después.
Pasada la media hora de encuentro, en el 66', con el Betis replegado en campo propio, Valverde se vistió de mago para con un taconazo desde la media luna dejar solo a Mbappé frente a Rui Silva.
El galo no falló ante el luso y, pocos minutos después, tras un penalti sobre Vinicius, cogió el esférico y desde los once metros dejó el partido visto para sentencia.
El Real Madrid se va al parón de selecciones a cuatro puntos del FC Barcelona, pero con mejores sensaciones de las que vino de Gran Canaria. Mbappé afina la puntería, Vinicius el colmillo en banda y solo falta engrasar la sala de máquinas... pero ya volverá Bellingham. Por el momento, hoy cogió la batuta Valverde, y de qué manera.
