Durante la multitudinaria presentación de Eden Hazard en el Santiago Bernabéu, se pudo observar un detalle importante: al belga le quedaba la camiseta muy ajustada. Aterrizaba en Chamartín pasado de peso. "No voy a mentir, es verdad. si estoy de vacaciones, estoy de vacaciones. Soy de los que cogen peso rápido y también lo pierdo. En verano cogí cinco kilos", se ha sincerado el ex futbolista del Chelsea en la revista Sport/Foot Magazine.
El atacante, por el que el club blanco abonó en verano 100 millones de euros, no ha logrado la continuidad deseada. Las constantes lesiones han frenado su progresión: "Tardé en coger el ritmo al principio porque en el primer partido de Liga noté unas molestias en el muslo y tuve que parar".
Por último, elogió a Zinedine Zidane, su entrenador e ídolo desde pequeño. "Los entrenamientos son muy placenteros, siempre con la pelota. Estuve tres años con entrenados italianos como Conte y Sarri y redescubrir este placer me gusta".