A escasas horas de que Leo Messi aterrice en la capital francesa para unirse al París Saint Germain, la actual plantilla del club parisino ya reúne a un montón de estrellas y Leo sería la guinda del pastel.
Entre muchas otras cosas, dejará varios reencuentros. Uno de ellos, con su excompañero y amigo Neymar Jr, con quien lleva tiempo queriendo reencontrarse en un vestuario, pero también se volverá a ver las caras con quien fuera su homónimo en el Real Madrid: Sergio Ramos.
La salida de ambos, tanto del Fútbol Club Barcelona como del equipo blanco, ha dejado una vacante en el liderazgo de los dos clubes, dejando la entidad en el que llevaban tantos años y la capitanía.
Ese brazalete les hacía responsables de la defensa de los clubes en los que ahora ya no están y por los que muchas veces dieron la cara, lo cual, en ocasiones, suponía el enfrentamiento entre ambos.
Lo cierto es que la mayoría de veces imperaba el respeto, pero los roces Messi-Ramos en los Clásicos se han acabado ya que ambos jugadores se enfrentan a nuevos retos. Esta vez lo harán juntos y luchando por un mismo objetivo, muy a pesar de los intereses de Madrid y Barça: convertir al PSG en el mejor club del mundo.