El parón de Navidad puede ser 'agua bendita' para el Manchester City. El conjunto celeste, tras empatar frente al West Bromwich Albion, penúltimo en la Premier League, se encuadra en la séptima posición de la liga inglesa, quedándose a cinco del líder, el Tottenham de José Mourinho.
Pep Guardiola, que es intenso de por sí a la hora de vivir los partidos, mostró en su propio ser la impotencia del cuadro 'cityzen' a la hora de no poder cerrar sus partidos.
De hecho, el técnico llegó a propasarse con el cuarto árbitro encarándose con él cuando este se disponía a ofrecer el tiempo añadido.
Guardiola le recriminó de manera insistente el añadido y le agarró del cartelón para evitar que mostrara el tiempo que él ya previamente había escuchado.