Primera jornada de LaLiga... y primera polémica por manos en el área. De nuevo, la zona gris del reglamento entra en acción junto al VAR en el penalti señalado en el Celta - Atlético tras una infracción de Marcos Llorente en el área que acabó con el balón en los once metros y con gol de Iago Aspas.
La jugada sucedió con 0-1 en el marcador en el minuto 55 del segundo acto. Oblak despeja mal un cuero que le cae al delantero de Moaña y, en su golpeo, el balón termina dando en la mano de Marcos Llorente.
Termina ahí después de rebotar, en primer lugar, en su pecho, viniendo por tanto de un rechazo del propio jugador rojiblanco.
El trencilla, Munuera Montero, fue al vídeo a ver la acción y, después de varias tomas, señaló con su mano el punto de penalti.
Aspas finalizó con clase la acción y puso de manera magistral el balón en las mallas de Jan Oblak.
El Comité Técnico de Árbitros, de cara a la temporada en curso, dijo que el colegiado no sancionará la infracción si la mano está en posición natural, si está pegada o próxima al cuerpo, si está apoyada o rumbo al apoyo, en un balón jugado por el mismo jugador, si procede de despeje o si es accidental.
Además de la mano, Marcos Llorente recibió tarjeta amarilla por la acción.