Momento clave de la temporada para los grandes europeos. Para los equipos que se juegan sus respectivos torneos domésticos y también seguir en la Champions League. Es el caso del PSG, que vive una situación al borde del colapso después de la derrota por 3-1 ante el Mónaco. Una que ha derivado en, tal y como desvela'L' Equipe',una tremenda discusión en el vestuario con un Luis Campos más que cabreado.
El consejero deportivo, señalado en Francia por la inactividad en el mercado de invierno, entró a la caseta para recriminar a los jugadores del cuadro parisino su "falta de agresividad". Algo que no gustó demasiado a todos.
En especial, a Marquinhos y a Neymar. Los tres comenzaron a discutir, dedicándose palabras en portugués que dejaron a muchos, incluyendo a miembros del staff, con cara de sorprendidos.
El ex del Barça llegaba ya picado al vestuario. Durante el partido ya se le vio más que cabreado, teniendo incluso desaires con sus propios compañeros de equipo. Más concretamente, con el joven Ekitiké.
Discusión Marquinhos - Donnarumma
Pero la cosa no queda ahí, porque Marquinhos también discutió con Donnarumma. El central, capitán, pidió al italiano que no fuera a saludar a los ultras que estaban en Mónaco. El arquero no escuchó su petición y fue a donde estaban los aficionados.
Lo peor es que el Bayern de Múnich ya espera a los de París. El PSG, además, cuenta con la baja de Kylian Mbappé, que no podrá medirse a los bávaros tras lesionarse en el aductor ante el Montpellier. Se le espera para la vuelta en Múnich, pero a saber.
De momento, el PSG ya suma en este 2023 las mismas derrotas que en 2022. Llevamos menos de mes y medio, pero ya llevan cuatro tras perder ante el Lens, el Rennes, el Marsella y el Mónaco.
Sin fichajes en invierno
Mientras, Luis Campos, como se expuso anteriormente, está señalado. Los refuerzos esperados, Ziyech y Skriniar, no llegaron. El primero, por culpa del Chelsea, que mandó mal hasta en tres ocasiones la documentación pertinente. En el caso del central del Inter, Campos se negó a pagar los 20 millones que pedían por él.