Thibaut Courtois se agigantó, sí, pero la exhibición de Kylian Mbappé fue total. Si el Madrid no salió goleado en Paris ante el PSG fue claramente por él. El mejor de los blancos. Pero Mbappé fue demasiado.
En el descuento el galo hizo magia. Se fue de todos en el área, con un regate espectacular, y disparó raso donde ni Courtois podía llegar. Su partido fue memorable, de esos que hacen época. Un futbolista diferente.
La primera parte fue una pesadilla para los de Carlo Ancelotti. Sin balón, replegados atrás y sin capacidad de salir. Eso sí, el PSG apenas dispuso de dos llegadas con peligro.
En ambas fue Mbappé el protagonista. Primero con un envío a Di María y posteriormente en una cabalgada en solitario que acabó despejando Carvajal.
En la segunda mitad Courtois se agigantó. Primero ante Mbappé con una mano fuerte abajo. Minutos después ante Messi desde el punto de penalti. Carvajal había derribado claramente a Mbappé. Y el belga detuvo ante el delirio de sus compañeros.
Mbappé no se detuvo. Siguió insistiendo y rozó el gol. En un disparo cruzado la pelota se marchó rozando el palo. Muy cerca del tanto que pusiera la guinda a su partidazo. Sin duda, el mejor del PSG siendo el más peligroso durante todo el encuentro.
Vinicius no fue el de otras noches. Apenas encontró espacios y estuvo muy errático en el partido. Ni regateó ni buscó la portería. Ancelotti colocó a Eden Hazard a falta de diez minutos, pero el belga tampoco tuvo tiempo para ser protagonista.
Y así, con resultado favorable al PSG, el partido llegó a su final. Todo se decidirá el 9 de marzo en el Santiago Bernabéu... aunque los parisinos se marchan con ventaja. Una cita en la que no estarán ni Casemiro ni Mendy por amarillas. Una terrible noticia para los blancos.
