Será Mariano quien figure como el autor del 0-1 del Real Madrid ante el Cádiz. Sí, el gol lo marcó él, porque él fue quien empujó la bola tras un tremendo jugadón de Rodrygo. El brasileño se lució en una acción en la que pareció Pelé y que vuelve a demostrar que está en un momento de forma, tanto física como mental, extraordinario.
Fue en el minuto 5 cuando agarró el cuero el brasileño en una acción con cero peligro aparente. Sí, aparente, porque Rodrygo hizo lo que habría firmado un Pelé. Un Maradona. Un, en un fútbol más actual, Messi. Desde la banda arrancó la moto, y no paró hasta llegar a la línea de fondo.
Le salieron al paso varios jugadores del Cádiz. Algunos con más intensidad que otros. Al entrar al área, jugó con un cambio de ritmo brutal para dejar en tierra a otros tantos futbolistas. Así llegó, y aún así, tras muchos metros corriendo y regateando, supo tener calma para levantar la cabeza.
Vio a Mariano, en boca de gol, y se la puso para que, con la izquierda, de primeras y cayéndose al verde, pusiera el balón dentro de las mallas del Cádiz.
Un jugadón tremendo que hace sonreír al madridismo. Que hace ver que el brasileño, que llegó como joven promesa, cada vez está siendo más una realidad.
Camino similar al de Vinicius, que este año ha explotado gracias a la confianza y a los minutos que le está dando Carlo Ancelotti. Rodrygo, en su caso, ha aprovechado cada segundo que ha tenido... en especial en una Champions League que no se entendería sin sus goles.
Él fue el gran responsable de todo lo que pasó ante, por ejemplo, el Chelsea y el Manchester City, y su insistencia le sigue dando más minutos con un Real Madrid ya campeón de LaLiga.
