El equipo que previsiblemente debía quedar último de grupo, en su primera vez en la Champions, acumula dos victorias en dos partidos. Una de ellas nada más y nada menos que en el Santiago Bernabéu donde venció por 1-2 ante el Real Madrid. Yakhshibaev y Thill fueron los goleadores del equipo de la región de Transnistria.
Saltó la sorpresa en el Santiago Bernabéu a los 25 minutos. El Sheriff se adelantaba tras una gran jugada por el costado izquierdo. Cristiano centró al segundo palo y allí encontró a Yakhshibaev para que cabeceara donde no podía llegar Thibaut Courtois.
El Madrid se volcó entonces en busca del empate, ya sí esta vez finalizando jugadas en las botas de Vinicius, Benzema y un Eden Hazard muy activo en el ataque. Pero el partido se marchó al descanso con ventaja para el Sheriff.
Salió el Madrid embravecido probando constantemente al portero rival. La defensa rival, un muro, resistía y resistía. Hazard lo intentó desde la frontal en un disparo colocado que terminó en saque de esquina.
Vinicius reclamó penalti en una jugada en la que fue derribado en el área y el colegiado acabó señalando un penalti, también sobre Vinicius, minutos después en otra jugada similar. Fue Benzema el encargado de hacer el empate desde la pena máxima colocando la pelota junto al palo derecho.
El guardameta Athanasiadis evitó el gol de Luka Modric con la cara. El equipo de Carlo Ancelotti seguía volcado, pero no daba con la tecla para volver a perforar la portería. Rodrygo, Vinicius, Jovic... todos ellos tuvieron oportunidades según pasaban los minutos.
Y cuando el Madrid más merecía la victoria... llegó el gol del Sheriff. Thill, desde la frontal, colocó la pelota en la misma escuadra. Era el 1-2 a falta de pocos minutos para la conclusión. Y así terminó el encuentro con uno de los resultados más sorprendentes de los últimos años en el feudo blanco.