El aplazamiento del Barcelona - Real Madrid ha dejado completamente rotos a muchos aficionados. Gran parte de ellos venía de otros países tan solo para ver el Clásico, y al final se van a volver a sus lugares de origen con las manos vacías.
Y con menos dinero, pues devoluciones cero: "Nos hemos gastado 1.200 euros... y ya no nos lo van a devolver".
Además, la ilusión la tienen por los suelos: "Era nuestro sueño, poder venir y ver el Clásico entre el Barcelona y el Real Madrid. Al final nada".
"Lo que nos queda es entrar al Tour del Camp Nou, no podemos ver nada más", dice un aficionado.
A pesar de que saben el motivo del aplazamiento, piden que esto no debería haber sido excusa: "Deberían pensar más en la comunidad internacional que viene a esto".