Miembros de la unidad canina se dirigen al parking de la terminal privada del aeropuerto de Barcelona. El objetivo es el vehículo de Luis Suárez.
Este martes por la mañana, el 112 recibía una llamada anónima alertando de un paquete sospechoso en los bajos del coche del jugador del Barça.
Desde ese momento, se activaba el protocolo de seguridad. Policía, TEDAX y patrulla canina se hacían cargo de la situación.
Acordonaban parte del recinto y procedían a la inspección ocular policial, con unidades caninas y con miembros del equipo para desarticular explosivos.
El alto número de detalles de la llamada anónima alertaba aún más de la situación, pero, por suerte, todo ha quedado en un susto.
La policía mantiene parte del dispositivo por seguridad, mientras intenta ponerse en contacto con la persona que ha realizado el aviso.