Los últimos acontecimientos de MotoGP son dignos de una película. El mercado ha enloquecido y todo gira alrededor de Ducati, de Marc Márquez y de Jorge Martín. Este último, por cierto, ya ha firmado un nuevo acuerdo con Aprilia al ver que la otra marca italiana no cumplía su palabra.
Todo empezaba la semana pasada antes del Gran Premio de Italia, en Mugello. La prensa avanzó que Jorge era el elegido para subir a la oficial junto a Pecco Bagnaia. Su sonrisa y sus palabras lo decían todo. "Se ha dado el primer paso y ahora hay que elaborar el contrato...", apuntaba el de Pramac.
Pero entonces Márquez entró en escena y soltó la bomba. "Pramac no es una opción para mí", dijo ante los micrófonos en la previa del fin de semana. Y en Ducati se vieron encerrados, conscientes de que podían perder al ocho veces campeón del mundo de motociclismo.
A partir de ahí, las dudas empezaron. Gigi Dall'Igna, director de la marca, no quería perder bajo ningún concepto a Márquez y le pidieron tiempo a Martín, que se hartó. Ya había avisado el madrileño que si no se quedaba la moto roja cambiaría de marca.
Según publica 'Autosport', el pasado domingo Ducati le volvió a trasladar a Martín que su 'ascenso' al equipo oficial no estaba cerrado a pesar de las conversaciones previas. Y este decidió tomar una decisión radical: firmar con Aprilia.
Este lunes apareció en el box de Aprilia junto a Aleix Espargaró, su inseparable amigo del circuito, y firmar un contrato que parecía imposible la semana pasada. Un giro de guion completo.
Y ahora todos esperan el anuncio sobre Márquez. Ducati debería hacerlo oficial antes de Assen, que se corre en tres semanas. Justo el compañero que Pecco no quería. El italiano advirtió a su equipo que mantener la "armonía" era fundamental. Y Márquez simplemente querrá ganar. Será una etapa muy interesante la que se abrirá a partir del curso que viene.
