Red Bull ya ha empezado la 'guerra psicológica' con Ferrari. A las palabras de Helmut Marko, que culpó a Carlos Sainz por el posible bajo gasto de la 'Scuderia' en cuanto a actualizaciones, ahora se ha sumado Christian Horner, jefe del equipo de las bebidas energéticas. Él apunta directamente a Charles Leclerc y a su batalla con Max Verstappen.
Una que está siendo limpia, al menos de momento: "Es inevitable que todo estalle en algún momento".
"Las primeras carreras han sido épicas y si esto sigue así estallará. Todo a medida que la temporada avance, a que haya más en juego y a si se vuelven más competitivos", cuenta en declaraciones que recoge 'Motorsport'.
Hasta este momento, todo está 'en orden': "Las luchas que hemos visto hasta ahora han sido respetuosas y justas".
En ese sentido, Horner recuerda la 'fiesta' que tuvieron con Mercedes y con Lewis Hamilton la pasada temporada, con muchos roces en pista, fuera, por radio...
"Hubo muchas cosas fuera de la pista. Ahora todo parece estar más centrado en lo que pasa en la pista. Esta temporada todo parece estar centrado en el asfalto. Las carreras han sido geniales", dice.
Y ojo a lo que afirma de Mercedes: "Creo que pronto les vamos a ver unirse a la fiesta"
"No nos podemos olvidar de ellos. Tienen tiempo para volver y meterse en el espectáculo", finaliza el jefe de Red Bull.