Fernando Alonso es un maestro de las carreras. El asturiano, bicampeón del mundo, está en un momento excelso de forma tanto a nivel físico como a nivel mental y competitivo, llevando a Aston Martin, a un coche que hace un año era penúltimo del Mundial, a ser tercero en el campeonato y a lograr varios podios a lo largo del curso.

Sí, eso ya de por sí deja claro de qué estamos hablando. Pero lo que lo hace todavía más evidente es esa tremenda atención en todo. En cada detalle. En cada cosa que pasa a lo largo de cada una de las vueltas de cada prueba. Porque Alonso es un piloto, un ingeniero, un jefe de equipo... lo es todo.

Lo han dicho tanto en su escudería como en otras. Lo saben tanto en su garaje como en el resto de boxes. Es especial. Es capaz de leer cada carrera antes que el resto. Es capaz de entender cada momento y de elegir sabiamente. Hasta leecha un ojo a los monitoresque hay en las pistas para ver cómo le va a su compañero...

"Solo hay una forma de..."

Y todo eso tiene ya su explicación. Una explicación que ha dado en 'High Performance': "En cuanto me bajo la visera trato de ejecutar la carrera como un robot"

"Sin emociones. Solo hay una forma de ver la bandera a cuadros más rápido. Entrego todo lo que me dijo el equipo", cuenta.

Alonso lo detalla: "Es la forma de conducir más eficiente posible. Pienso en los neumáticos, la batería, la estrategia... Recuerdo todo lo que hablé con el equipo".

"Es mi responsabilidad. El realizar ese trabajo como último eslabón de mi equipo. Tratando de no tener emociones", prosigue.

Al parón, Fernando Alonso se fue conun total de 149 puntos que le valen para ser tercero y para tener a Sergio Pérez a 40 unidades. Tras él, Hamilton, a un solo punto.

Y para Zandvoort, mejoras

Queda por ver qué sucede en el GP de Países Bajos, para el cual Aston Martin ha avisado que llevará un buen paquete de actualizaciones que tienen como objetivo recuperar el terreno perdido en julio.