Fernando Alonso se ha convertido en el Gran Premio de Singapur en el piloto con más carreras disputadas de la Fórmula 1 con 350, superando así a Kimi Raikkonen, que había dejado la marca en 349. Su debut en el Gran Circo fue hace 21 años, en Australia 2001.
Alonso llegaba despuntando desde las categorías inferiores. Adrián Campos se fijó en su talento, se convirtió en su mánager y le llevó en el camino hasta la Fórmula 1. Tras ganar el Euro Open y despuntar en la Fórmula 3000, muchas escuderías de F1 se fijaron en él.
Ferrari, mediación de Jean Todt, tenía un acuerdo verbal con el asturiano para fichar por Ferrari y cederlo a la escudería Prost, pero Flavio Briatore intervino. El italiano le fichó para Renault (por entonces denominado Bennetton Renault) y lo cedieron a Minardi, escudería con la que debutaría en Albert Park en 2001.
Sin embargo, en su momento Alonso no las tenía todas consigo de poder estrenarse ese año: "Mi debut fue con Minardi en 2001 y no pudimos probar el monoplaza antes de Australia. El equipo iba camino de desaparecer, estaba en bancarrota, y Paul Stoddart llegó en el último momento y llevó el coche a Australia". El magnate de la aviación fue clave en el debut de Alonso en la Fórmula 1. El australiano compró la escudería a dos meses del inicio del Mundial y aseguró la presencia del asturiano en la parrilla.
Ese debut en Australia fue "caótico", tanto que Alonso contó en 2019 una anécdota de sus primeros libres: "Estudiamos el volante el miércoles y jueves del gran premio. Recuerdo que salí del pit lane en los primeros libres y había una cola de monoplazas en la calle de boxes porque el semáforo estaba en rojo. Casi me estrellé con ellos porque no podía encontrar el botón de neutral".
La carrera del debut no fue mucho mejor. El Minardi, construido en solo dos meses, era poco competitivo. Alonso partió 19º (de 22 pilotos). La carrera fue ganada por Michael Schumacher y el asturiano acabó 12º, en el que sería el tercer mejor resultado de aquella temporada. Los múltiples abandonos favorecieron al español, que solo acabó por delante precisamente de ambos pilotos del equipo que recalaría después, Giancarlo Fisichella y Jenson Button de Renault.
Después llegaría una serie de capítulos que todo aficionado se sabe de memoria: el paso a Renault, dos mundiales, una lucha al límite con Hamilton en McLaren, una 'vuelta a casa', pilotar para Ferrari, sufrir con Honda, un 'hasta luego' para probar el WEC y el Dakar, y un regreso con Alpine para demostrar que la edad es solo un número. Todo esto después de una primera carrera caótica. Pero ya van 350... y las que quedan.
Sin embargo, la carrera 350 no la recordará con especial cariño. El '14' tuvo que abandonar en Marina Bay cuando marchaba sexto, mientras llevaba manteniendo a Max Verstappen detrás de su Alpine durante varias vueltas. Un final de gran premio triste el día que consigue nuevo hito histórico.