La presente temporada de Fórmula 1 está dejando grandes noticias y exhibiciones para la afición española. Mientras Fernando Alonso ha mostrado gran nivel en su regreso al 'Gran Circo', yendo de menos a más con Alpine y prometiendo guerra para 2022, Carlos Sainz ha llegado y ha besado el santo en Ferrari.
El madrileño suma, por el momento, tres podios en su primera temporada en la 'Scudería' (fue segundo en Mónaco y tercero en Hungría y Rusia), además de haber logrado su primer premio al piloto del día en el último Gran Premio en Turquía.
Sainz ocupa la sexta posición del Mundial con medio punto de ventaja sobre su compañero de equipo, Charles Leclerc, y tiene en la mira a Sergio Pérez, que es quinto a 18,5 puntos, y a Lando Norris, que se sitúa cuarto con 28,5 unidades más que Carlos.
El '55' tiene dos motivos principales para soñar con 'algo' más esta temporada: su regularidad y su nueva unidad de potencia. El ex de McLaren, Renault y Toro Rosso es el piloto más regular actualmente en F1 tras encadenar nueve carreras consecutivas en los puntos.
De hecho, Sainz solo se ha quedado en dos carreras fuera de los diez primeros puestos: en Portugal y Francia acabó undécimo, a las puertas de los puntos.
A pesar de aún no estar al 100% cómodo con el SF21, Carlos ha mostrado una capacidad mayor de adaptación que otros 'novatos' como Ricciardo, Vettel, Pérez o Alonso en sus respectivas escuderías.
Además, y a diferencia de Lando Norris que podría recibir penalización por ello, el piloto madrileño ya cuenta con una unidad de potencia nueva, lo que le permitirá luchar en mejores condiciones por el principal objetivo de Ferrari este año: dar caza a McLaren en el Campeonato de Constructores (les diferencian 7,5 puntos).
Por último, pero no menos importante, al hilo de la regularidad cabe reseñar que Carlos Sainz, al igual que solo Daniel Ricciardo y Antonio Giovinazzi, no ha abandonado ninguna carrera esta temporada. El 'chili' tiene mucho que decir todavía esta temporada.