El fichaje de Adrian Newey por Aston Martin está muy cerca de hacerse oficial tras un arduo periodo de negociaciones entre Lawrence Stroll y el ingeniero.

Tal y como aseguró el propio dueño de la escudería de Silverstone, llevaba años hablando con el británico y había hecho "todo lo posible" para ficharle.

Pues bien, con su incorporación cerrada a falta del anuncio oficial, 'Jugones' ha descubierto cuál fue la clave de su decisión.

Con Ferrari habló mucho, le seducía trabajar con Lewis Hamilton, pero hubo un inconveniente.

A Adrian Newey no le apetecía vivir en Italia, ha priorizado su familia y Lawrence sabía cuál era su punto débil.

Una visita secreta en junio a las nuevas instalaciones de Aston Martin fue crucial. La fábrica, su diseño, sus posibilidades, el túnel del viento... todo sedujo al todavía ingeniero de Red Bull.

Newey tendrá libertad de diseño del monoplaza, cobrará 24 millones de euros al año y al fin podrá trabajar con Fernando Alonso... sin abandonar Inglaterra. Cuatro razones de peso que desembocan en un fichaje histórico.