Aston Martin ha llevado un paquete de mejoras para Hungría. Sí, lo mismo que en Emilia Romagna. Lo mismo que el año pasado en múltiples carreras. Y sí, al igual que en esas ocasiones de momento la evolución se ha notado entre poco y nada. Para muestra, un dato.
Para muestra, el crono que ha logrado Fernando Alonso. Y sí, por si solo de poco sirve, pero sirve de mucho más cuando cogemos y lo comparamos con el que ha marcado Lance Stroll.
El canadiense, en los Libres 1 de Hungaroring, no llevaba absolutamente nada nuevo en su AMR24. El objetivo, comparar cómo iba el coche con y sin las actualizaciones que desde la fábrica han puesto en el monoplaza.
Entre los dos...
Lo cierto es que duele con verlo. Porque el canadiense ha sido más rápido. Porque, con neumático blanco y cuando ambos han buscado un registro, le ha sacado más de cuatro décimas a Fernando Alonso.
Noveno ha sido Lance con un registro de 1:19.256, unas cinco décimas más lento que el tiempo de Carlos Sainz. Fernando Alonso, por su parte, ha terminado 13º.
Ha terminado con un tiempo de 1:19.686 a casi un segundo del madrileño de Ferrari. La diferencia entre el AMR24 sin mejoras y entre el AMR24 con mejoras ha sido de 0.427.
Mucho van a tener que trabajar para la clasificación del sábado si no quieren que, de nuevo, esas mejoras caigan en saco roto y vuelvan, como suele suceder, al punto de partida.