Y de nuevo ha acertado. De nuevo, Fernando Alonso tenía razón. Porque lo dijo. Porque, a diferencia de lo que sucedió en Austria, él veía que aquí sí. Que aquí iba todo mejor. Que, en esta ocasión, Aston Martin tenía motivos para la esperanza en Gran Bretaña. En casa. En Silverstone. En una carrera que comenzó décimo y terminó octavo.
No fue fácil. Ni mucho menos. No fue sencillo terminar de mejor modo del que se empezó. Porque la pista fue lo que fue. Porque el asfalto estaba como estaba. Porque tan importante era el pilotaje como tomar las mejores decisiones en el muro.
Ambas cosas se aliaron con Fernando. Ambas cosas las bordó Fernando. Porque hizo lo que debía hacer. Porque aguantó el envite de Alex Albon en la salida. Porque por poco Hulkenberg la lía antes de la primera vuelta. Porque no cometió los errores que otros sí cometieron.
Leclerc y Pérez...
Supo esperar. Supo tener paciencia. Supo que a pesar de la lluvia, débil lluvia, no era momento de arriesgarse. Que lo hicieran otros. Otros como Leclerc. Otros como Sergio Pérez. Los dos, adiós carrera. Sangrante en ambos casos, con un mexicano que vivió un auténtico drama.
Que, de nuevo, no dio motivos a su equipo para considerar acertada la decisión de su equipo de renovarle. Con Verstappen peleando hasta el último momento por el triunfo frente a Hamilton en Silverstone, a él le doblaban todos. Penúltimo. Penúltimo de todos cuantos acabaron.
Solo tiene un coche en pista Red Bull. Como solo lo tuvo Mercedes. Como Ferrari. Como, también, McLaren después de cometer con Oscar Piastri un más que importante error. Mientras, Alonso se mantenía ahí, octavo y tranquilo.
Aston Martin, puntos con ambos coches
Poniendo cuando tocaba las gomas adecuadas. Cambiando a intermedios, después de Stroll. Cambiando a medios, después de Stroll. Yendo de la mano con Lance hasta la bandera a cuadros en un Gran Premio que puede, y debe, suponer un antes y un después para Aston Martin.
Porque tras el desastre de Austria las cosas han vuelto a su cauce. Porque ahora llega Hungría donde, por fin, habrá un leve descanso para poner mejoras en el AMR24. A saber cómo salen... A saber si salen bien, o si salen como en Imola.