En el experimento del primer fin de semana de F1 con dos carreras, pudimos ver uno de los mejores GP de Fernando Alonso desde su vuelta al gran circo. El asturiano marcó la remontada del fin de semana el mismo sábado, subiendo de la undécima posición a la séptima, y manteniendo la posición hasta la bandera de cuadros del domingo.
No solo el resultado fue bueno. Las impresiones del bicampeón del mundo sobre el formato también fueron positivas. "Creo que estoy contento porque cambia un poco la rutina a la que estás acostumbrado en el fin de semana.
Fue un poco más estresante, sólo unos entrenamientos libres, luego los coches se quedan en 'parc fermé'", declaraba Alonso en rueda de prensa.
"Tenemos tres días de acción. El viernes (con la clasificación), el sábado (carrera al sprint) y el domingo (carrera). Las tandas largas son muy importantes para pilotos e ingenieros, pero no para la gente que lo sigue desde casa", palabras con las que deja claro que para él la decisión de mantener este formato la tienen los aficionados.
"Necesitamos preguntarles a ellos y tener 'feedback' suyo, qué pensaron del fin de semana, qué estuvo bien y qué no estuvo bien y si tenemos que cambiar algo". Aunque si por 'Magic' fuera, él tiene claro lo que cambiaría.
Allá por 2007 se decidió introducir la clasificación partida en Q1, Q2 y Q3. Antes de ese cambio para la 'qualy', los pilotos tenían una vuelta y un juego de neumáticos para hacer la mejor vuelta que les posicionara para la carrera del domingo.
Por eso, Fernando cree que volver a esa fórmula "aportaría incluso mejores carreras de clasificación cuando alguno de los mejores coches no está en el lugar que le corresponde".
