Fueron momentos de caos en Sochi. La lluvia golpeaba con fuerza cuando solo quedaban tres vueltas para el final y comenzó el carrusel en boxes. Entrar a tiempo podría suponer terminar en cabeza. Y así lo hizo Carlos Sainz.
Su compañero en Ferrari, Charles Leclerc, ha explicado que tomó la decisión de dejar a Sainz entrar primero al box porque era él quien se estaba jugando el podio y no quería entorpecerle.
"De repente empezó a llover bastante, pero éramos muy competitivos en esas condiciones. El tercer sector estaba completamente seco, así que lo que perdíamos en los dos primeros sectores, lo ganábamos en el último. Entonces decidí quedarme afuera", explica el monegasco.
"En un momento dudé, pero se suponía que Carlos Sainz debía parar en esa vuelta, así que no quería parar al mismo tiempo, pero a la vez sabía que en la siguiente vuelta ya era muy tarde. Finalmente respeté las posiciones e intenté mantenerme en pista con neumáticos de seco y con la esperanza de que la lluvia disminuyera, pero no sucedió", detalla.
Este gesto de compañero de Leclerc fue clave para que Sainz sumara su tercer cajón de la temporada. El español ha caído de pie en Maranello, donde su trabajo se valora muy positiva.
Ahora Sainz busca su primera victoria de rojo. Es ambicioso y no se esconde... sabiendo que la temporada que viene con el nuevo reglamento todo puede cambiar en el campeonato de Fórmula 1.