Cuando Fernando Alonso llegó a Aston Martin, nadie se esperaba ni se imaginaba lo que iba a pasar y lo que iban a conseguir. El año pasado eran séptimos en el Mundial de Constructores, hoy son tratados como héroes en los prolegómenos del Gran Premio de España.
La segunda posición conseguida en Mónacoy el tercer puesto en el Mundial de Pilotos permiten soñar a los aficionados con cosas grandes. Cosas que, por qué no, podrían llegar este fin de semana si las condiciones cambiantes lo permiten.
Lo que está claro es que Fernando Alonso es otro. Sus ojos han vuelto a brillar ante las posibilidades de pelear con los grandes, con quienes debería de haber estado peleando siempre.
Ha pasado de finalizar noveno en la temporada pasada con Alpine a ser tercero a tan solo 51 puntos de Max Verstappen. Además, ha conseguido cinco podios en seis carreras y ya únicamente le falta por subirse a lo más alto.
En la previa del GP, Alonso ha atendido a los medios de comunicación y ha dejado claro la unión que hay en el equipo: "En Aston Martin hay una de las mejores comuniones que yo recuerde". No hay más que ver la unión que hay entre los pilotos, los ingenieros e incluso Lawrence. Además, la nueva unión con Hondaa partir de 2026 no hace más que incrementar esa "comunión".