Ferrari vio frustrados sus intentos para que Carlos Sainz debutara con el SF1000 en los test para jóvenes de Abu Dabi, por lo que aseguraron que al menos programarían un entrenamiento privado.
Mattia Binotto ya anticipó en diciembre que ese test sería a finales de enero y cuyo objetivo es que se adapte lo antes posible al monoplaza, ya que los test de pretemporada se vieron reducidos a tres días, es decir, día y medio por piloto, algo insuficiente para cualquiera pero sobre todo para aquellos que llegan a la Fórmula 1 o han cambiado de equipo.
Según ha informado 'SoyMotor', el español debutará con el SF71-H en Fiorano la próxima semana, el circuito de pruebas de la escudería italiana ya que los cierres perimetrales en Italia impiden viajar a cualquier otro sitio.
Sorprende la elección de Ferrari de utilizar el coche de 2018 en vez de el de 2019, aunque hay que recordar en ese año tuvieron que llegar a un acuerdo secreto con la FIA por por la ilegalidad de su motor.
Leclerc también debería acudir a este test privado pero el monegasco dio positivo por coronavirus hace apenas una semana, lo que podría haber puesto en peligro su presencia.
Sainz esta trabajando muy duro para poder llegar lo mejor posible, con numerosas sesiones en el simulador y reuniones con sus ingenieros ya que es consciente que al ser el novato partirá con cierta desventaja respecto a Leclerc, algo que pretende reducir lo antes posible.