Carlos Sainz es, sin duda alguna, el mejor piloto que queda de todos los que están o pueden estar disponibles de cara a 2025. El madrileño lleva varios años brillando en Ferrari, tras hacerlo también en McLaren, y está sin equipo después de que en Maranello confirmasen que será Lewis Hamilton el compañero de Charles Leclerc a partir del próximo curso.

A día de hoy, Sainz sigue sin tomar una decisión. Carlos tiene varias propuestas, con esa idea de Mercedes y de Red Bull como favoritas a la par que complicadas para seguir teniendo opciones de ganar el año que viene.

Sin embargo, las más probables, ahora mismo, son tres. La que parecía más clara, por los vínculos que unen a su padre con la marca, era Audi. Los alemanes llegarán a F1 en 2026, pero el año que viene seguirán siendo Sauber y de momento son el único equipo sin puntos en este Mundial. Luego, Alpine y Williams.

Los galos, tras la llegada de Flavio Briatore, parecían ver la luz al final del túnel pero nada más lejos de la realidad. Esos brotes verdes de Barcelona se han secado y todo queda en un a ver qué pasa. Además, posiblemente dejen de fabricar sus propios motores para unirse a Mercedes... y eso es tan positivo como negativo al convertirse en equipo cliente. Y los de Grove...

Sainz padre y el mánager de Carlos, en Williams

Los de Grove son un histórico venido a menos. A mucho menos. No sería la primera vez que Sainz se enfrenta a este tipo de desafío, pues cuando firmó por McLaren el equipo era lo que era y con ellos llegó al podio tras un año. Y Ferrari, lo mismo después de que antes de la llegada de Carlos firmasen uno de los peores años de toda su historia.

En Williams quieren a Sainz, y Thomas Maher, periodista, captó una imagen de Carlos padre saliendo del motorhome del equipo británico en el Gran Premio de Bélgica.

A saber si fue por placer o por negocios su visita, pero fuese lo que fuese lo cierto es que cada día que pasa es un día menos para saber qué hará Carlos Sainz en 2025.