Fernando Alonso pasó un completo calvario en el GP de Singapur. El asturiano fue el último de los coches en pista en pasar por línea de meta, y sufrió, además de un problema mecánico, una sanción, un horrendo pit stop... y como él mismo dijo, un "coche inconducible".
Un monoplaza lejos de ese espectacular rendimiento que vimos al comienzo de curso y también en Países Bajos. Lejos de poder pelear por el podio. Mucho menos por la victoria. Lejos de podercompetir con los Red Bull... y con Ferrari, Mercedes y McLaren.
Con el GP de Japón a la vuelta de la esquina, poco van a poder hacer en Aston Martin más que encontrar qué es lo que falló y cómo poner un 'set up' adecuado para que Alonso disfrute en la que es su pista favorita del Mundial.
Para que se le pase el cabreo que mostró tener tanto por radio como luego ante los medios, dejandopoquísimas palabras tras una prueba para olvidar.
"Si el rendimiento no es el que espera..."
Mike Krack, su jefe, habló acerca de las palabras de Alonso y del coche "incoducible" que había en Marina Bay.
"Como equipo tenemos que reconocer si un piloto es crítico. Si el rendimiento no es el que él espera y al que está acostumbrado... creo que está bien", afirma Krack.
Y prosigue: "Es normal que los deportistas reaccionen así. Nosotros queremos que lo den todo. No hay problema alguno".
Y mientras...
Atrás se han quedado en Aston Martin en esa carrera por progresar y por avanzar. Por seguir la estela de equipos como Ferrari y McLaren, que han dado un salto enorme y que, en el caso de la 'Scuderia' supieron estar ahí cuando Red Bull falló. Carlos Sainz,victoria en Marina Bay.
