Fernando Alonso termina su periplo en Australia en 2024 con cierto sabor agridulce. El asturiano, en un carrerón, terminó sexto y sabiendo que había sacado como en él acostumbra lo mejor de su coche. Lo mejor de su Aston Martin. Lo mejor de un monoplaza que peleó por más de lo esperado en Albert Park. Sin embargo, una sanción cuanto menos rigurosa le hizo caer al octavo puesto.
Todo por una acción con George Russell. Con el inglés buscando de cualquier forma adelantar al muro asturiano, de repente se salió de pista y terminó completamente volcado sobre el asfalto pidiendo una bandera roja que no llegó.
La FIA tomó cartas en el asunto y, después de estudiar el caso además de escuchar las versiones de ambos pilotos decidieron sancionar a Alonso con 20 segundos.
Todo porque, según ellos, Fernando "frenó cien metros antes" que en el resto de ocasiones en las que entró en esa curva, la 6 de la pista de Melbourne.
"Sin grava en esa curva..."
Alonso reaccionó en redes, con un mensaje claro y de sorpresa sobre lo que acababa de suceder: "Una sanción sobre cómo debemos tomar las curvas o conducir los coches".
"Sin grava en esa curva jamás nos habrían investigado", afirmó Alonso en redes sociales.
"Fue sorprendente"
Y en esa línea se ha mostrado Mike Krack. El luxemburgués, jefe de Aston Martin, habló tras la prueba de lo sucedido una vez se conoció la sanción a Fernando.
"Fue sorprendente. Verle caer al octavo puesto con la sanción... Tenemos que aceptarlo", dijo.
Sobre la carrera, se va con buen sabor de boca: "Hemos sumado 12 puntos para el Mundial".
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El GP de Australia terminó con victoria de Carlos Sainz, que se impuso a Charles Leclerc y a Lando Norris. Max Verstappen abandonó por un problema en sus frenos.
