Alpine es un polvorín. El equipo francés ha sido el gran perdedor del Gran Premio de Bahréin y afronta este 2024 la que, probablemente, será la temporada más dura de su historia. Pierre Gasly y Esteban Ocon fueron último y penúltimo en la clasificación, y tan solo pudieron acabar por delante de Valtteri Bottas y Logan Sargeant en carrera, que tuvieron problemas de fiabilidad.

Es el último episodio de un descalabro que arrancó en 2022 con la salida de Fernando Alonso rumbo a Aston Martin. Desde entonces, los franceses han pasado de aspirar al podio a arrastrarse por las pistas siendo al farolillo rojo de la parrilla.

La falta de rendimiento que ya mostró Alpine en 2023 se llevó por delante a la cúpula del equipo, con su jefe de equipo, Otmar Szafnauer, al frente.

Medio año después, el ingeniero rumano ha hablado sobre la situación de la escudería de Enstone y ha cargado contra sus máximos responsables. "El cronómetro no miente y el coche no parecía muy competitivo", ha dicho Szafnauer en declaraciones a 'Viaplay'.

"Está justificado que tomar decisiones no tan buenas en los niveles superiores, eliminar personas y no crear seguridad psicológica en un equipo, ese es el resultado que sucede después de eso", ha añadido.

Szafnauer cree que estas decisiones desacertadas vienen provocadas por la presión a la que está sometida la actual cúpula del equipo. "Pero lo entiendo, la Fórmula 1 es un juego difícil. Tienes que hacer muchas cosas bien y si te equivocas en algunas, te duele", ha concluido.