Lance Stroll acumula una más con el equipo Aston Martin. El canadiense, que ya en Qatar tiró el volante al suelo y empujó a su preparador físico tras la Q1 para la 'sprit race', protagonizó una radio más que tensa en la carrera corta del GP de Estados Unidos con su propio ingeniero.
Porque Stroll está al límite. Lleva así desde hace tiempo. Sin puntuar desde Bélgica. Sin catar ni una Q2 normal desde hace cinco carreras. Y a eso hay que añadir que Aston Martin, que el AMR23, no pasa ni mucho menos por su mejor momento.
Buena prueba es la decisión de saltarse el 'parc fermé' y de salir desde el 'pit lane' en Austin. De no saber qué camino tomar. De ponerle a él el suelo nuevo y dejar a Alonso con el antiguo. En esas, Stroll, en la carrera al sprint, no pudo más.
Ni acabó. Porque no tenía frenos. Eso dijo por radio. Por una radio en la que ya dejó claro que no puede más.
Fue en una radio con Ben Michell, su ingeniero de carrera, cuando explotó: "¡Esto es una mierda! ¡Es una p*** mierda!"
Entre ambos, 136 puntos
Lo cierto es que la clasificación está dictando sentencia. Stroll, que el pasado año pudo plantar cara a Sebastian Vettel, está viendo cómo Alonso le esta superando sí o sí en cada fin de semana.
Fernando, cuarto y con siete podios, suma 183 puntos y es cuarto; él es décimo con 47 unidades y no puntúa desde antes del parón del verano.
