La lucha en la primera vuelta del GP de Gran Bretaña entre Lewis Hamilton y Max Verstappen fue absolutamente increíble… hasta que terminó de la peor manera. El neerlandés se fue contra el muro y tuvo que retirarse en ambulancia.
Ambos coches se tocaron… y tras la carrera las culpas se cruzaron. Red Bull llegó incluso a pedir la suspensión para Hamilton en palabras de su asesor Helmut Marko.
Hamilton tampoco se escondió, a pesar de la sanción que le impuso la FIA (diez segundos en un pit stop). En los micrófonos de 'Dazn' culpó a Verstappen y aseguró que este accidente "estaba llamado a ocurrir".
La tensión entre ambos pilotos es total desde la primera cita de la temporada en Barein, con los límites de pista de por medio. Ahora todo ha saltado por los aires con este toque que provocó que Verstappen no pudiera terminar
Y el mundial se aprieta. Son solo siete los puntos que tiene de ventaja el de Red Bull sobre el siete veces campeón del mundo. En el mundial de constructores Mercedes también se acerca ante el desastre de domingo de un Sergio Pérez que ni siquiera entro en los puntos