Después del bajón visto por Aston Martin en Austria y Gran Bretaña, el equipo de Fernando Alonso afronta el Gran Premio de Hungría con ilusión ya que, como han afirmado tanto el equipo como el bicampeón de Fórmula 1, es un trazado óptimo para el AMR23 donde una buena clasificación podría acercar la ansiada 33.
Sin embargo, tanto en Hungaroring como en el GP de Bélgica en Spa-Francorchamps, la escudería de Silverstone irá con lo puesto.
En las dos citas previas al parón veraniego, Aston Martin no llevará ningún paquete de mejoras y simplemente actualizará y optimizará el actual.
Así lo ha confirmado Tom McCullough, director de rendimiento del equipo, en declaraciones a 'Motorsport'.
"A las próximas dos carreras con el coche que tenemos, pero luego traeremos las cosas que haya tan pronto como podamos, y eso hará el monoplaza más rápido. Tenemos todavía muchas actualizaciones, así que continuaremos haciendo eso", ha explicado.
De esta manera, no será hasta el Gran Premio de Países Bajos, que se celebrará en Zandvoort el último fin de semana de agosto, cuando Aston Martin presentará novedades en su monoplaza. Eso sí, no serán minucias.