Fernando Alonso quiere a los mejores a su lado. Los quiere para poder ganar. Para poder luchar por ese tercer Mundial tan esquivo desde 2007. Desde ese año ante Lewis Hamilton, y Kimi Raikkonen, en McLaren. Desde que todo se esfumase en 2010 y en 2012 con Ferrari. Pero sigue en forma. Sigue confiado. Sigue con esa convicción y motivación en esta etapa en Aston Martin.
En un Aston Martin en el que volvió al podio. Volvió a él de forma recurrente. Fue en 2023, curso en el que los verdes dieron la gran sorpresa durante el comienzo del Mundial. Ahora, más apagados. Enfocados en el futuro. En un 2026 en el que van con todo.
Con Honda en su interior. Y con fichajes de renombre en el aspecto técnico. Porque tienen a Andy Cowell. Porque van a tener a Enrico Cardile. Porque están dejando secos a Mercedes y a Ferrari, y quieren completar el nuevo 'tridente' con el gran nombre de la Fórmula 1.
Sí, quieren a Adrian Newey. Al gurú. Al arquitecto de los Williams, de los McLaren y de los Red Bull campeones. Están dando los pasos adecuados. Están haciendo lo que han de hacer. Él, de momento, ya parece haber dicho 'no' a Ferrari.
"Vamos en la dirección correcta"
Y mientras el asturiano ya ejerce. Ya va soltando mensajes a saber con qué intención. Porque él sabe que Newey le ha dejado sin algún que otro título, y también es consciente del nivel que puede dar tener a alguien como él en Aston Martin.
En unas palabras que recogen en 'SoyMotor', Alonso ha sido claro: "El equipo es cada vez más fuerte y más atractivo. Los mejores ingenieros, los mejores diseñadores. Todos vienen a Aston Martin".
"La dirección es la correcta para lo que queda de año y, sobre todo, para el futuro con ese 2026 con un cambio en las regulaciones. Estoy preparado para disfrutar tras el volante", insiste.
Y es que está feliz: "El futuro es brillante. Estoy ilusionado. Las mejores instalaciones en la F1 serán las nuestras".
