En Bakú atendimos a la antítesis de lo vivido, sobre todo, en el último año de Fernando Alonso en Alpine junto a Esteban Ocon.

Mientras que con los de Enstone eran batallas que sobrepasaban los límites éticos entre compañeros de equipocomo la de Arabia Saudí, con Aston Martin reina el compañerismo, el buen rollo y el 'remar todos en una misma dirección'.

Esto se pudo comprobar de primera mano en algunas radios del Gran Premio de Azerbaiyán. Primero, fue Lance Stroll el que le dijo al equipo que no iba a atacar a Alonso, que iba delante de él.

Después, fue Fernando el que replicó dirigiéndose al muro para que le 'chivaran' a su compañero su balance de frenos.

Tras la carrera, y a propósito de un vídeo publicado por la Fórmula 1 sobre estas radios, el piloto asturiano publicó un mensaje que no ha dejado indiferente a nadie.

"El trabajo en equipo hace que el sueño avance", escribió Alonso. Ese trabajo en equipo que brilló por su ausencia en Alpine y que terminó por dinamitar el espejismo onírico del 'Plan'. Ahora, esta vez sí, 'La Misión' carbura en Aston Martin.