Tras el Gran Premio de Eifel, donde Lewis Hamilton igualó el record de 91 victorias de Michael Schumacher, Ross Brawn, director deportivo de la Fórmula 1, comparó a ambos pilotos.
"Michael era un piloto muy dramático en la pista en muchos sentidos y tenía una personalidad muy tranquila fuera de la pista. Lewis es lo opuesto: silencioso pero letal en términos de entrega en la pista, pero su extravagancia sale a relucir fuera de la pista. No podría haber dos personajes más diferentes. Los dos han conseguido un éxito asombroso", ha asegurado Brawn en el portal oficial de la Fórmula 1.
Y es que Hamilton está dando mucho que hablar con su lado más activista, luchando por la igualdad interracial y exigiendo justicia ante la brutalidad policial, algo que provocó que la FIA prohibiese las camisetas reivindicativas después de que éste las exhibiera en el podio y en las entrevistas. Aunque ahí no acaba, también alza la voz ante la necesidad de cuidar el planeta y trata de reducir su huella de carbono lo máximo posible.
El británico nunca ha ocultado su admiración a Schumacher y ha confesado que no esperaba llegar a igualarle. Brawn tampoco lo creía posible, al menos no tan pronto: "Michael siempre dijo que los récords están para batirlos, pero admito que no esperaba que este se batiera tan pronto y no puedo imaginar que Lewis se vaya a detener aquí. Por su trayectoria, subirá el listón en los próximos años a un nivel que será asombroso".
Aunque en las siguientes temporadas, parece ser que Renault empezará a ser competitivo, al menos así lo demostró con el podio de Ricciardo, y con la vuelta de Alonso cree que será "increíblemente emocionante".
Además, espera que Honda reconsidere su decisión y regrese pronto al 'Gran Circo'. Especialmente de cara a 2026, año en el que se pone como límite lograr sacar una nueva fórmula de unidades de potencia.