Cuatro años después de su retirada de la Fórmula 1, Nico Rosberg pensó en volver a la competición. Todo ocurrió cuando en 2020, en el GP de Sakhir, Lewis Hamilton dio positivo por coronavirus. Al alemán se le pasó por la cabeza, pero lo descartó rápido.
"Definitivamente hubiera considerado levantar el teléfono, pero físicamente no hubiera podido hacerlo", ha afirmado en una charla con Jenson Button el expiloto de Mercedes.
"No hubiera podido pilotar más de dos vueltas con ese coche. Mis brazos se solidificarían como una roca, mis dedos... No podría sostener el volante más de dos vueltas, estoy seguro", ha confesado el campeón del mundo en el año 2016.
"Por no hablar de que el cuello me caería entre las piernas cuando estoy frenando, ¡no podría mantener la cabeza rígida! Las fuerzas G y esas cosas, el desafío y el desarrollo que necesitas en todos tus músculos, los músculos de los brazos...", ha explicado.
Para finalizar ha descartado volver para una temporada: "Si me dices: 'Puedes probar el coche de Valtteri Bottas mañana en un día de test', yo diría: '¡Vaya, eso es genial!' Me encantaría hacerlo. Si me dices que tengo la oportunidad de volver durante una temporada... No, no, gracias. Estoy muy conento con mi segunda vida y ya está todo hecho y cumplido".
Fue George Russell el que finalmente sustituyó a Hamilton y pudo incluso lograr un gran resultado. Sin embargo, tuvo que abandonar por un problema en su Mercedes.