Fernando Alonso está contento tras regresar a Q3 en el GP de Azerbaiyán, donde ha colocado a su Alpine por delante del de su compañero Esteban Ocon. El asturiano ha resaltado la gran cantidad de sucesos que han pasado en clasificación, y considera que tenían ritmo para ser "séptimos".
"Séptimo u octavo era posible. Había potencial... pero era complicado coger ritmo porque te cortaban la progresión y el ritmo", dice.
Y es que ha habido hasta cuatro banderas rojas: "Cada vez que montábamos un juego nuevo había una. Los tiempos los hemos hecho todos con gomas viejas. El fin de semana, de momento, bien".
El asturiano, además, protesta por lo injusto que es que algunos puedan cambiar cosas del coche: "Nosotros terminamos y tenemos un coche que no podemos tocar hasta las doce. Esta gente destroza el suyo y puede tocar lo que quiera. Es extraño".
Para terminar, habla sobre sus opciones en la carrera de Bakú... donde además realizad una predicción.
"Si la gente sigue al 120% va a haber coches de seguridad. Si se calman, podremos adelantar", concluye.
Fernando Alonso arrancará el GP de Azerbaiyán desde la octava posición, tras una clasificación marcada por los accidentes y las hasta cuatro banderas rojas que ha habido.
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