El ruido es parte de la esencia de la Fórmula 1. Es una premisa compartida por pilotos, equipos y aficionados a la categoría reina del automovilismo y a la que ahora se suma Stefano Domenicali, CEO de Liberty Media y máximo responsable del campeonato.
El 'Gran Circo' estrenará en 2026 un nuevo reglamento técnico que supondrá una revolución tecnológica. Los motores se simplificarán y se apostará por los combustibles sintéticos para reducir las emisiones y hacer que el deporte sea sostenible desde el punto de vista medioambiental.
Esta dirección cuenta con el apoyo de los equipos y fue clave, entre otras cosas, para atraer a Audi y convencer a Honda de volver como fabricante en 2026 de la mano de Aston Martin. Sin embargo, preocupaba a los aficionados, ya que este cambio podía suponer una merma en el ruido y en la potencia de los motores como ya sucedió en 2014.
El sonido, clave para Domenicali
Aquel cambio de reglamento supuso una gran pérdida de interés, principalmente, porque los motores pasaron a ser mucho menos ruidosos. Pero los actuales propietarios de la Fórmula 1 han aprendido la lección y aseguran que no volverán a tropezar con la misma piedra, tal y como ha explicado Stefano Domenicali.
"La intención es asegurarnos de que en la nueva regulación el ruido de los motores sea más alto, porque eso da emoción", ha explicado Domenicali en declaraciones a 'Radio 3AW'.
"Es realmente lo que nuestros aficionados quieren escuchar y es nuestro deber comprometernos con eso", ha añadido el máximo mandatario de la Fórmula 1.
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Los motores de 2026 continuarán teniendo seis cilindros, como los actuales, aunque se simplificará la parte eléctrica eliminando el MGU-H, es decir, el sistema de almacenamiento de energía térmica, que dispara los costes de los propulsores actuales. Esto permitirá que aumenten las revoluciones, y por tanto, también lo hará el ruido.