Cuánta falta hacía esto. Cuánto necesitaban en Aston Martin un resultado, un fin de semana, como el de Brasil. Como el que protagonizaron Lance Stroll y Fernando Alonso en Interlagos. Como ese viernes, como ese sábado... como ese domingo. Como esa carrera en la que por fin volvió el ritmo. Como esa carrera en la que por fin volvió el podio. En la que, después de Países Bajos, el bicampeón asturiano volvió a degustar el sabor del champán.
Y lo degustó tras ya no una lección de magia, sino tras obrar un auténtico milagro. Tras contener a Sergio Pérez tras él durante más de 15 vueltas. Al Red Bull. Al Red Bull con DRS. Al Red Bull que contaba con una velocidad punta alrededor de 25 kilómetros hora más que el AMR23. Sí, así lo hizo. Es más, lo hizo aún con la más difícil todavía.
Porque el mexicano le adelantó en la 70. En la vuelta 70 de 71. Todo podría parecer perdido, pero no. No para Alonso. No para Fernando. En el giro final, Fernando se acercó a Pérez en la curva 1 para soltarle un tremendo hachazo por fuera en la cuatro.
A 53 milésimas
Por delante. Por delante y entrando a meta a 53 milésimas del Red Bull. A 0,0 como ponía en la retransmisión. De 'photo finish'. Así, sin más y sin menos. Sí. No hay ni que tratar de entenderlo. No hay que hacerlo porque es, simplemente, Fernando Alonso.
Su radio definió todo lo que se ha vivido en Aston Martin. Lo que significa para él Aston Martin. Lo que es la familia Aston Martin. En las buenas, en las malas... y de nuevo en las buenas. Porque más emoción no podía haber en sus palabras.
"Esto es para todos vosotros"
"Gracias, chicos... Esto es para vosotros. Para la gente de la fábrica. Para todos, para todos vosotros", dijo Fernando por la radio a su equipo.
Allí ya se estaba preparando el fiestón. Porque lo han pasado mal. Porque han sido no pocos fines de semana en un túnel que parecía no tener final y que puso en alerta para 2024. Porque han sido muchos días de trabajo en la fábrica. Probando. Poniendo todo a punto. Poniendo el AMR23 en disposición de pelear por un nuevo podio antes de cerrar el curso.
Así ha sido, y quedan dos carreras en las que a saber qué pasa. Las Vegas es un misterio, y el cierre de Mundial en Abu Dhabi pondrá punto y final a un gran año para Alonso y Aston Martin. Pondrá punto y seguido a un proyecto que busca ser campeón.