Adrian Newey ya habría tomado su decisión. Según 'Autosprint', y tal y como recogen también en 'SoyMotor', el gran gurú de la F1 vestirá los colores verdes de Aston Martin después de acabar su vínculo con Red Bull.

El anuncio oficial, debido al acuerdo que tiene Newey con los de las bebidas energéticas, será en septiembre, cuando concluya la cláusula que tiene el inglés con los actuales campeones del mundo.

Porque a pesar de tener ofertas de Ferrari, de McLaren y de Williams, Newey ha elegido a Aston Martin. Ha elegido aceptar la irrechazable oferta que Lawrence Stroll le ha puesto en la mesa.

Una por cuatro años de duración a razón de 100 millones de dólares. Una que, eso sí, no solo es económica. Porque Newey ya ha visitado la fábrica de Aston Martin. Porque el proyecto de Silverstone le ha convencido.

Alonso, Honda...

Le ha convencido saber, también, que en Aston Martin está Fernando Alonso. No es ningún secreto que el asturiano siente gran admiración por el inglés, y que el inglés tiene ganas de trabajar con otro de los mejores pilotos de la historia. Tras Verstappen, el siguiente es el asturiano.

Es hacer del bicampeón un tricampeón para 2026. Para un año en el que hay otra cosa que a Newey le gusta. Red Bull tiene a Ford, pero Aston tiene a Honda. Tiene a una marca que Adrian conoce muy bien de estos años en Red Bull y con la que ha adaptado a la perfección el chasis de los de las bebidas energéticas en un tándem imparable.

Y si esas tres razones no fueran suficientes hay otra. Es la inversión, brutal inversión, de Aston Martin. Con Aramco en 'las sombras', el equipo de Silverstone está cada vez más cerca de estrenar esa bestial fábrica a la última que estará a la vanguardia en la F1. Y sí, un nuevo túnel de viento.

Todo, para un único fin. Para ganar. Para lograr el Mundial. Para pelear por el título de Fórmula 1 tanto a nivel de constructores como en el de pilotos. Adrian Newey... con Fernando Alonso y con Honda, y con una fábrica vanguardista a razón de 100 millones por cuatro años. Todo, en Inglaterra. En Silverstone.