El 'porpoising' es el gran protagonista de la temporada 2022 en la Fórmula 1. En los test de pretemporada apareció este rebote en los coches que dificulta la conducción de los pilotos y que les destroza físicamente, como se pudo comprobar al finalizar alguna carrera en pilotos como Pierre Gasly o Lewis Hamilton, que terminaron hasta sin fuerzas para salir del coche.
Por ello, la FIA tomó cartas en el asunto. En el Gran Premio de Bélgica entrará en vigor un cambio, una reducción para el suelo flexible, pero la medida más importante llegará para 2023. La FIA anunció una normativa que obligará a los equipos a subir el difusor y los bordes del suelo, algo que fuerza a las escuderías a cambiar el diseño de los coches y que ya ha generado rechazo en varios equipos del paddock que presionan a Mohammed Ben Sulayem, presidente de la FIA, a suavizar la nueva regla para evitar un gran cambio en el diseño de los monoplazas.
Ya en el GP de Francia, Christian Horner habló con 'Sky' y reconoció que a ellos no les preocupa los cambios que llegarán en Spa, pero sí criticó los que llegarán en 2023: "Creo que el problema es lo que están buscando como remedio para el próximo año", manifestó con rotundidad el británico.
Pero el jefe de Red Bull va más allá: "Creo que hay una gran cantidad de presión para cambiar las regulaciones de manera significativa para el próximo año para que un determinado equipo pueda correr con su coche más bajo y beneficiarse", dijo el líder de la escudería austriaca en clara referencia a Mercedes.
Horner piensa que es "demasiado tarde" para la introducción de la nueva normativa y que la FIA va demasiado lejos porque eliminar el 'porpoising' "es fácil". "Nosotros no hemos tenido ningún problema en todo el año. Solo hay un equipo que ha tenido un gran problema", expresó el británico.
"Tenemos alguno de los ingenieros con más talento del mundo en este deporte, y casi puedo garantizarte que, si volvemos el año que viene, probablemente no habrá coches con este tipo de problemas. En las últimas carreras ha parecido que estaba bien. Creo que lo que no tenemos que hacer es tener una reacción exagerada que podría tener impactos fundamentales en los monoplazas del año que viene", finalizó diciendo Horner.