En 2018, encarando la última temporada de su nefasta experiencia con McLaren, Fernando Alonso lanzó un aviso: el día que el samurái tenga una buena espada, estará en condiciones de luchar.
"Tengo mucha confianza en mí mismo. Solo necesito un coche que esté a dos, tres o cuatro décimas de los mejores, con eso podré jugar", explicó entonces el bicampeón del mundo de Fórmula 1.
Cinco años después, Alonso ha sumado seis podios en las primeras ocho carreras de la temporada, situándose a 78 puntos de Max Verstappen y a solo nueve de 'Checo' Pérez.
El Aston Martin AMR23 ha sido la gran sorpresa de la temporada, pasando de ser del séptimo coche al segundo, y gran culpa de ello no la tiene solo Fernando, sino la camada de 'gurús' que ha aglutinado Lawrence Stroll en fábrica.
La curva lenta, el punto fuerte
El monoplaza es el coche más rápido en frenada, curva lenta y tracción, siendo muy competitivo en circuitos con frenadas fuertes y curvas lentas.
Así lo señaló recientemente Dan Fallows, director técnico del equipo, afirmando que es "un coche que sobresale en un área": "Vimos que nuestro monoplaza es fuerte en las curvas lentas".
Curva rápida, un gran problema
Lo de Aston Martin ha sido una de cal y otra de arena. Fuertes en curva lenta, los de Silverstone han perdido mucho en los giros rápidos como se pudo ver en el Gran Premio de España, pero eso ya va camino de solventarse.
Así lo explicó Mike Krack, jefe del equipo: "No estoy preocupado ya que creo que hemos visto las últimas actualizaciones, que parecen estar funcionando según lo previsto".
"Y hay algunas pistas donde hay muchas curvas de alta velocidad y creo que en las curvas de alta velocidad mejoraremos. No se ha visto en Canadá, no hay muchas curvas rápidas, pero hay muchos puntos de frenado. Así que estamos deseando que lleguen las próximas carreras", ha añadido el luxemburgués recientemente.
Ahora, con Spielberg y Silverstone en el horizonte, Aston Martin tiene un examen final: "Creo que en estos circuito veremos la verdadera fuerza de Red Bull. Y también tendremos una mejor indicación de cuán lejos estamos".
El DRS, la fortaleza de Red Bull que quieren igualar
Reducida la pérdida en curva rápida, la gran diferencia de Aston Martin con respecto a Red Bull es la ganancia en recta con el DRS.
Tom McCullough, director de rendimiento del equipo verde, ha reconocido que están focalizados en ello: "Estamos trabajando en eso (en el DRS)".
"Esa ha sido un área de enfoque para nosotros. Cada actualización que traemos al coche es con el objetivo de ayudar a la eficiencia del DRS. Así que estamos dando más pasos en eso todo el tiempo", ha añadido.
Con el punto fuerte en curva lenta, la ganancia en curva rápida y la próxima mejora en recta con el DRS, Aston Martin tiene los ingredientes para hacer soñar a Fernando Alonso con no solo la 33, sino con algo más. Restan 14 carreras... y una temporada con el asturiano en el retrovisor es 'molto longo'.