Carlos Sainz fue uno de los grandes protagonistas de la prueba al sprint de la Fórmula 1 en el GP de Brasil. El de Ferrari, en Interlagos, hizo una salida bestial que parece más propia de la PlayStation que del mundo real. En una sola vuelta pasó de ser quinto a segundo firmando un arranque que es ya de los mejores de 2021.
Porque el madrileño lo tenía de su parte con las gomas blandas y saliendo desde la zona limpia, pero hay que hacer lo que él hizo. Hay que coger y pisar a fondo, apurar al máximo la frenada en la primera curva y medirse de tú a tú nada más y nada menos que a Max Verstappen.
En cuanto se apagó el semáforo, Sainz se tiró a por el rebufo de Sergio Pérez. Antes de la primera curva, el piloto azteca era historia. Y Pierre Gasly también, porque se cruzo entre ambos poníendose delante del galo y cogiendo el interior para adelantar a Checo.
Luego, Max Verstappen. El neerlandés se quejaba amargamente por radio de un asunto de la caja de cambios cuando, de repente, apareció Sainz por su izquierda. Con el interior ganado, el de Red Bull casi comete una imprudencia.
No en vano, el juego está el Mundial, pero él se olvidó por completo cuando pujó contra Sainz. Se terminó yendo por fuera, sin toque alguno de por medio, y Carlos se puso segundo con tan solo Bottas por delante.
Al final, Verstappen dio buena cuenta de él con el paso de las vueltas y con las gomas blandas pidiendo ya el cambio.
Sin embargo, su excelsa defensa ante Sergio Pérez le permite sumar un punto para él y para Ferrari, y salir en la carrera larga desde la tercera posición.
Te puede interesar
El mote que le ha puesto el paddock a Fernando Alonso por su desparpajo en el sprint
Max Verstappen da un toque a la F1 por las carreras al sprint: "Lo único que haces como piloto..."