Lo tenía complicado, muy complicado, Fernando Alonso en Austria. Por salir en la posición 15 y, sobre todo, por un ritmo más bien inexistente de su Aston Martin. De un Aston Martin, de un AMR24, que no. Que no estaba en el Red Bull Ring. Que ya avisó el mismo piloto asturiano en Barcelona de que esto podía suceder. Y sí, sucedió.
Sucedió eso y otra cosa más, porque en esa curva 3, en la de la radio de Aston Martin comprendiendo "el dolor" de Fernando, se llevó puesto a Guanyu Zhou. Poca discusión hay sobre eso al ver la repetición.
Al ver cómo Alonso, en esa acción, entró pasadísimo con el AMR24 bloqueando neumáticos para aprovechar el adelantamiento de uno de los RB al Sauber. El chino, fuera de pista.
Diez segundos para Alonso
Golpe hubo entre los dos. El Aston Martin se llevó el golpe en su neumático delantero izquierdo. No hubo daños graves en el monoplaza... pero sí que los hubo en los tiempos.
Porque dirección de carrera tomó nota, lógicamente, de la acción. Decidieron rápido, mientras estudiaban también una penalización para Lewis Hamilton. El inglés, por sobrepasar la línea blanca en el pit lane, se llevó cinco segundos; Fernando, diez.
Rodaba undécimo en el momento en que llegó la sanción. Undécimo buscando la décima plaza de Daniel Ricciardo con los dos Alpine por detrás. Ocon y Gasly, peleando entre ellos, querían ver hasta dónde llegaba su pelea mientras Fernando buscaba poner tierra de por medio.
Daba lo mismo. Eran diez segundos los que iba a perder Alonso por esa curva 3 que ya señaló él mismo en el sprint de Austria. En esa curva, en esa misma curva en la que Hulkenberg le echó fuera en la corta del Red Bull Ring.