Una vez pasado el ecuador del Mundial de Fórmula 1, Max Verstappen se sitúa líder con 208 puntos, contando con una ventaja considerable respecto al segundo clasificado, Charles Leclerc, con 170 puntos. Cerca también está el compañero de Max, 'Checo' Pérez, tercero con 151 puntos. A pesar de la distancia, el mexicano aún se ve con opciones de levantar el que sería su primer título de campeón.
Pérez llevaba una muy buena dinámica, pero dos abandonos en las últimas tres carreras le han alejado del primer puesto. "Espero con ansias otra semana de carreras en la que podamos mejorar nuestro desempeño en Austria y aprender de nuestro resultado la última vez", explica en declaraciones facilitadas por el equipo Red Bull.
A pesar de ello, el mexicano espera que su mala suerte cambie este fin de semana en Francia: "Después de un duro fin de semana en Austria, es genial volver a competir y tener la oportunidad de arreglar las cosas". "Mi objetivo es cambiar la dinámica".
Aunque está a 57 puntos de Verstappen, la mayor distancia desde que empezó el Mundial, el piloto de Red Bull se muestra muy confiado: "Todavía estoy en la pelea por el Campeonato de Pilotos, así que personalmente también es importante no perder más puntos. El año pasado logré mi segundo podio con el equipo en Francia y tengo muchas ganas de tratando de repetir eso".
El calor, un problema para Red Bull en Francia
Uno de los puntos débiles de Red Bull es que degrada muy rápido los neumáticos. Se esperan temperaturas superiores a los 30 grados este fin de semana y 'Checo' avisa: "Físicamente parece que será una carrera muy exigente y habrá que ver cómo va la degradación de los neumáticos por el calor".
Además, el mexicano también comenta que existen diferentes trazadas en las curvas del circuito y es difícil saber cuál es mejor tomar para ser más rápido.