Unas palabras que se han repetido durante toda la semana. Esas que decían que Aston Martin no podía ir tan bien en Arabia Saudí como fue en Bahrein. Que las características del circuito perjudicaban sus puntos fuertes.
Pues a las primeras de cambio, Fernando Alonso ha demostrado lo contrario. Ha sido tercero en los Libres 1 por detrás de Max Verstappen y de Sergio Pérez. Su compañero, Lance Stroll, ha sido cuarto.
A seis décimas se quedó el asturiano de Max, ganador en la primera carrera. Y a dos décimas del otro Red Bull.
Más atrás quedaron unos sorprendentes Ferrari, que a priori sí deberían ir bien en este trazado. Tanto Charles Leclerc como Carlos Sainz han cambiado motor, algo que no llevará penalización (Leclerc, sancionado con diez posiciones ya por el cambio de centralita).
Los Mercedes están muy, muy lejos. Fue pesimista Lewis Hamilton en rueda de prensa, explicando con una sonrisa que para ganar la carrera deberían abandonar los Red Bull, los Ferrari y quizá algún Aston Martin.
Fue sólo la primera sesión de Libres, pero Aston Martin volvió a demostrar que la base de su coche es más que sólida. ¿Volverán a dar la sorpresa aquí en Arabia Saudí? En la clasificación será donde todos pongan sus verdaderos tiempos en pista.